Sheila Blanco, la pasión musical

Sheila blanco, junto con los hermanos Toch y "Gordo Elena" Me gustaría ser una gran profesional, realizar una crítica, sobretodo cuando se trata de intentar definir ARTE, pero a la vez estamos hablando de un concepto abstracto, subjetivo, que nace en el alma del creador, llevando implícito las vivencias del mismo, por ese mismo motivo, el arte también se crea desde el punto de vista del usuario o receptor, porque entra dentro de la persona y sus vivencias son los que dan forma concreta al concepto. Hoy, al ponerme frente la papel, las palabras no fluían, los tecnicismos resbalaban y la pasión ha asesinado a la razón para poder expresarse mediocremente.

Volví al juglar, a pesar de estar cerca de casa, iba con el objetivo muy concreto "la música": Sheila Blanco junto con los hermanos TOCH, acompañados de "Gordo Elena" , un concierto que hizo del Juglar la sala más grande de Madrid. Desde que conocí a Sheila Blanco, gracias a Javier Ezpeleta (persona a la que dedico este blog de vulgar palabras), he intentado asistir a todos, porque me parece que su música es una delicatesen, pero ayer, fue mucho más que eso, se comieron el escenario y su música creció con ellos. Un concierto que llenaba los rincones tan ocultos que ni el viento podría pasar. Desde el escenario se desbordaban los sonidos, y la interpretación derrochaba por el pie del mismo, empapando al público de dulces sensaciones, pero sin olvidar la mayor sencillez.

"Una artista estelar" como se definió ante el público y es que llega tan dentro que te impide hablar, respirar, moverte, por miedo a perderte una nota o el silencio escrito en una semifusa, quieres empaparte de todo lo que ahí acontecía, pero por dentro aplaudes con todas tus fuerzas.

Millones de etiquetas podrían definir el concierto: tango, blues, pop, rock, jazz, teatro, carisma, talento, música, ritmo, elegancia, pasión, glamour, interpretación ... entre otras, ya que fue heterogéneo y completo, lleno de potencia y buen karma. Reflejaron la alegría y emoción que ellos tenían porque bien dijeron que fue muy especial, porque estuvieron rodeados de los suyos. Demostraron que crecen en cada actuación y dejaron al público boquiabierto, cuándo se acabó desde el público sólo se oía: "genial, brutal, maravilloso, artistazos, grandes, es de otro planeta", aunque la humildad, modestia, el estar pendientes en todo momento de los que le acompañaban desde abajo, esa cercanía, es lo que demuestran que es de la Tierra y mucho más humana que el resto, admirable eso también porque con ese talento, te puedes creer lo más.

El concierto empezó con T.K, le siguió Olvídalo, Marilyn, Arte, Dos Cabezas, Chica Blues, Dormir, y se atrevieron versinonando he vuelto a amancer de LEPUNK, Di que no, También los hermanos Toch tuvieron su tiempo de ganar al público para promocionar su concierto del 11 de diciembre en en el juglar, con un tema lleno de soul, Joven Toch, vuelve Sheila para seducirnos con el tango La ladrona, posteriormente contándonos la historia más dura de SHEILA DOWN, nos enseña que no tiene obstáculos y el inglés vuelve a aparecer en escena, para dejarons boquiabiertos terminando con el más rock y ese tema Miénteme, un final apoteósico, que personalmente no me pudo dejar más impresionada, Mira el vídeo en acústico y luego en eléctrico y podrás comprobarlo.

Los puedes ver en las listas de reproducción de nuestro canal Youtube


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Un saludo y MILLONES DE GRACIAS A SHEILA BLANCO, HERMANOS TOCH y MARTÍN ELLENA por ese concierto.